Av. Antúnez de Mayolo 844 (Altura de la Municipalidad de Los Olivos) Teléfono 521-7857
lunes, 26 de mayo de 2008
EL MUNDO MÁGICO DE LA LECTURA: PREMIO A LA MEJOR INSTITUCIÓN EDUCATIVA ESPECIALIZADA, (Encuestadora Peruana de Opinión Pública y Municip. Los Olivos)
martes, 8 de abril de 2008
MARGARITA HOLZWARTH: "GANAMOS EL CIELO CUANDO DEJAMOS HUELLAS LECTORAS EN NUESTROS ALUMNOS"

LAS BRUJAS, UN CUENTO PARA TODOS

Para la mala fortuna del niño, una de las brujas lo olfatea y es capturado por ellas; le hacen beber una sobredosis del Ratonizador de acción Retardada y lo convierten en un ratoncito gris que debido a su nuevo tamaño puede esconderse y salvarse. El niño ahora convertido en ratón logra llegar al cuarto de su abuela y le cuenta todo. La abuela acepta a su nieto y deciden salvar a los niños de Inglaterra. Para ello deben robar un frasquito de la poción mágica y echarlo en el puré que comerán las brujas.
El niño-ratón utilizará su diminuto tamaño para conseguir ingresar en el cuarto de la Gran Bruja y robarle un frasquito de la poción mágica. Ingresará en la cocina y vaciará todo el contenido en la sopera de plata donde colocarán el puré que las brujas cenarán esa noche. Todo sale como lo habían planeado: todas las brujas se convierten en ratones y son liquidadas por los trabajadores del hotel, mientras que el niño-ratón permanece protegido por su encantadora abuela. Nunca más recobrará su antigua forma, pero se siente orgulloso por lo que ha hecho y, además, muy a gusto con su nueva apariencia y por tener a una abuela que lo quiere mucho.
Disfruten esta lectura y recomiéndelas a sus alumnos, les encantará. Otros cuentos igual de fabulosos, del mismo autor, son: Los Cretinos, Zuperzorro, Danny campeón del mundo, La maravillosa medicina de Jorge, James y el melocotón gigante, Matilda, Charlie y la fábrica de chocolates...
¡Buen provecho!
Gracias por leer
Manuel Urbina
sábado, 5 de abril de 2008
DE CARTA EN CARTA, UN CUENTO QUE ME HIZO LAGRIMEAR

Este cuento trata de Pepe un niño que constantemente reñía con José, su abuelo, y viceversa. El niño al no poderle decir directamente a su abuelo lo que piensa de él decide escribirle una carta, pero al no saber escribir debido a que no va al colegio, acude a don Miguel, que era uno de los escribidores del pueblo, para que le redacte una carta a su abuelo José. Don Miguel le pide como pago que vaya al colegio y que le cuente cómo son las cosas ahí. El abuelo recibe la carta y como tampoco sabe leer, también acude a don Miguel para que le lea la carta y para que le escriba la respuesta. Estas situaciones se van repitiendo, pero don Miguel arregla algunas de las palabras para que cambien de significado. El niño tiene que ir al colegio para pagar su deuda y poco a poco empieza a aprender a gustarle el colegio y aprende a escribir. Sin embargo, lo más importante es que a través de las cartas logra dirigirse al Gobierno para que le otorgue una pensión a su abuelo.
El cuento tiene una estructura muy simple, pero desde el primer momento logra llamar la atención del lector. Sus personajes principales son tres: el nieto, el abuelo y el escribidor de cartas, don Miguel. Es una lectura de acción muy rápida: los hechos se suceden casi inmediatamente lo cual hace que el lector difícilmente se desprenda del texto. Las historias van sucediéndose con mucha coherencia debido a su buena trama que hace creíble toda la historia. Por otro lado, la historia nos habla, de una manera muy bien dirigida, sobre la importancia de saber leer y escribir como instrumentos para conseguir la reivindicación de los derechos básicos del ser humano. También, podemos advertir el rol de las personas con instrucción que deben orientar a las personas analfabetas como es el caso del niño que a pesar de tener edad para ir al colegio, no va, sin embargo, don Miguel logra que el pequeño vaya a la escuela y poco a poco va observando y apreciando la importancia que tiene el saber leer y escribir.
La injusticia es también un tema que se puede percibir, sin embargo, podemos deducir que muchas personas se sienten víctimas de muchos abusos del Gobierno y otras instituciones, sin embargo también es verdad que muchas personas son víctimas de su propia ignorancia, porque a veces desconocen sus derechos y no los reclaman. El abuelo logra que el Gobierno le dé una pensión por los años que trabajó y cotizó sus obligaciones, pero más por la voluntad del nieto que logra escribirle al Gobierno y por sus argumentaciones de lo que es la justicia –las cuales las ha aprendido en la escuela-. Don Miguel, el escribidor, también forma parte de esta cruzada para otorgarle la pensión al abuelo quien a pesar de sus años tiene que seguir trabajando aunque se siente muy cansado.
De carta en carta, es un cuento precioso, tierno y muy conmovedor: una gran obra de Ana María Machado. Quisiera disentir con la forma tan rápida con que suceden los hechos, pero creo que es una constante en las obras de esta escritora brasilera lo cual sería una característica más de sus obras que una deficiencia de sus cuentos. En conclusión: una gran obra que merece leerla, releerla y comentarla entre amigos, alumnos y familiares.
Gracias por leer
Manuel Urbina
martes, 19 de febrero de 2008

-Profesora, sabe usted por qué no leen correctamente sus alumnos -y antes que le respondiera continuó- no leen porque usted es la culpable. Sinceramente, debería darle vergüenza decir que los niños nos saben leer. Usted es la profesora de aula y en estos dos años que lleva enseñando a mi hijo, nunca he visto una tarea o un ejercicio que fomente la lectura oral. He visto en todos sus cuadernos que usted le da más importancia a la tildación, al uso de las mayúsculas, a la escritura con la letra exacta. Usted no promueve el desarrollo de las habilidades lectoras de los niños y no se olvide que ello es su obligación y, lógicamente, estos son los resultados.
La joven profesora se había quedado como petrificada ante cada una de estas palabras, y en verdad daba pena verla en ese estado, sin tener argumentos para replicar. La señora Gómez continuó hablando firme y en un tono coloquial de tal manera que si alguien los hubiera visto no se habría dado cuenta lo que pasaba.
En ese momento recordó que sus colegas de otras aulas hacían:
- Señora Gómez, le agradezco por haber sido sincera y por haberme hecho ver que estaba equivocada. Tiene, usted, mucha razón al señalar que los profesores somos los principales modelos de lo que significa leer en voz alta y reconozco -gracias a usted- que no he realizado las actividades adecuadas para que los niños lean adecuadamente en voz alta.
Gracias por leer
Manuel Urbina
prolector@hotmail.com
¡¡¡¡¡¡NO QUIERO LEER ESE LIBRO!!!!!!!
No sé quién es o quién fue el "genio" que señala que los adolescentes deben leer obras como El ingenioso don Quijote de La Mancha, La Ilíada, La Eneída, La divina comedia, Crimen y castigo, Los Miserables, etc., etc. No es que estas obras sean malas; no, por el contrario son las obras más hermosas de la literatura universal, lo que ocurre es que son obras mayores y requieren de una literatura previa.
Cómo se les puede asignar estar obras a los adolescentes, cuando ellos recién están saliendo del estadio de la literatura infantil y les espera la literatura juvenil.Es un abuso lo que se hace con los estudiantes, pues se les quema sus etapas previas y ello da como resultado un país con deficiencia lectora. Si aquel "genio" o sus seguidores tuviesen razón, no figuraríamos como el último país lector en América y en el mundo. Al final, el alumno baja de internet un resumen, se lo aprende de memoria y como ni el mismo profesor a leído el libro en su totalidad termina siendo cómplice de aquel estudiante que termina odiando leer.
Por un minuto póngase en el lugar de un adolescente de 14 años y dígame si le interesaría leer un libro escrito hace más de 400 años y en un castellano en donde se nombran cosas y palabras que hoy no existen o no se usan y, además, aparecen palabras como "facer", "dixe", "per", "vuesa merced", etc. Y si a esto le sumamos la tarea de señalar el tema principal y los temas secundarios, la descripción de cada uno de los personajes, el género literario, la especie, la estructura del texto y otras por el estilo. ¿Tendría la motivación suficiente para leer?
Ahora veamos todo lo contrario, le interesaría leer un texto en donde el personaje es un muchacho enamorado de una linda chica a quien solo la ve desde lejos y que cada domingo juega en una liga de fútbol y que nunca conoció a su padre, pero presiente que aquel extraño sujeto que un día se acercó y le enseñó a patear el chanfle le resulta familiar. Y si a este libro le agregamos un lenguaje juvenil, fácil de entender, temas vinculados con su propia experiencia, 110 páginas, buena cubierta y muy atractivo... ¿Se animaría a leerlo?
Por favor, amigos, los profesores tenemos la obligación moral de hacer que los alumnos amen la literatura -y por defecto la lectura- y ello solo será posible en la medida de que se respeten las etapas de la literatura. No los podemos embarcar con las obras mayores porque sencillamente no es el tiempo todavía para leerlos. Queremos -de todo corazón- que lleguen a leer las obras de Dante, Homero, Víctor Hugo, Cervantes, Shakespeare, Vallejo, Arguedas, y que las amen, pero no imponerles cuando aún no están preparados. Es como si en vez de darles una bicicleta, le diéramos un camión de 16 llantas: al final van a salir contusos o finados.
Algunas obras para adolescentes:
Todos los futbolistas van al cielo, Pedro Badrán (Ed. Norma)
Templado, Jorge Eslava (Ed. Santillana)
Me dicen Sara Tomate, Jean Ure (Ed. Norma)
James y el melocotón gigante, Roald Dahl (Ed. Alfaguara)
Los Cretinos, Roald Dahl (Ed. Alfaguara)
Amigos robots, Isaac Asimov (Ed. Vicens Vives)
Florentino Supercochino, Jorge Eslava ( Ed. Alfaguara)
Sangre de campeón SIN CADENAS, Carlos Cuauhtémoc Sánchez (Ed. Diamante)
Harry Potter, J.K. Rowling (Ed.Emecé)
Solo estamos sugiriendo, pero no se olvide: antes debemos leerlos…
Gracias por leer
Manuel Urbina
prolector@hotmail.com
miércoles, 13 de febrero de 2008
¿USTED CREE QUE ES BUENO USAR EL DEDO PARA LEER?

¿Lo mismo hace cuando busca una palabra en el diccionario?
"Mientras lee, acompañe las palabras con el dedo, línea por línea. Comience de izquierda a derecha en esta línea y luego vuelva su mano hacia el margen izquierdo, así podrá repetir el movimiento en la línea inferior. Mueva su mano a una velocidad adecuada. Sus ojos seguirán el paso del dedo”.
Otro autor importante, Tony Buzán, creador de los MAPAS MENTALES, en su libro El libro de la lectura rápida (1998), señala:
“Lo mejor es emplear un objeto largo y delgado, como un lápiz o un bolígrafo, un palillo de los que se usan para comer comida oriental o un palito de tejer… Para obtener el máximo rendimiento de la guía (el objeto) basta con colocarla debajo de la línea y moverla suavemente mientras leemos. La guía reduce al mínimo la cantidad de trabajo que recae sobre el ojo, mantiene el cerebro concentrado y proporciona aceleraciones constantes que mantienen un alto nivel de comprensión”.
Y ahora, amigo lector, ¿se atreverá a usar su dedo o, mejor aún, un lapicero o un palito chino?, en todo caso deje que los niños sí lo hagan.
Para culminar, quiero dejar claro dos cosas: el uso del dedo o lapicero "puede ser prescindido" cuando el lector haya dominado la automaticidad o reconocimiento inmediato de la palabra y mejor, aún, si practica la lectura por bloques (que lo detallaré muy pronto) y, lo segundo; que el uso del dedo u otro objeto durante la lectura no es la solución definitiva para solucionar el problema de la pobreza lectora en el país, pero sí es una ayuda importante y práctica para el alumno. A esto debemos sumarle otras actividades que lleven al desarrollo de las habilidades lectoras de nuestros muchachos y, usted, tiene que ayudarnos.
Gracias por leer
Manuel Urbina
prolector@hotmail.com
HOY LEEMOS COMO HACE 2000 AÑOS, NO HEMOS EVOLUCIONADOS

Qué deberíamos decir hoy, tiempos de la autopista informática, la fibra óptica, el láser, la Internet, etc. No es raro encontrarnos con personas que confiesan no tener tiempo para leer textos más allá de los estrictamente necesarios en su trabajo o estudios.Pensemos que fuimos alfabetizados mediante un sistema que nos llevó a la “lectura silábica”.
martes, 5 de febrero de 2008
QUEREMOS QUE NUESTROS HIJOS SEAN BUENOS LECTORES
Entonces, los padres no sabemos qué hacer y por ahí nos dicen: "Cuéntale un cuento cada noche y verás cómo tu hijo se convierte en un gran lector". ¿Será esto suficiente, para que el niño o niña pueda desarrollar ese hábito tan deseado y que trasciende en una excelente comprensión lectora?No nos engañemos y que no nos sigan engañando porque ello no es suficiente. Con esto solo estaríamos subiendo un escalón cuando tenemos muchos por escalar, es decir, contarles o leerles cuentos claro que es importante, pero no es suficiente. Seguramente, usted amigo, habrá visto a mucha gente que compra un libro y lo lleva a todas partes, pero que no ha desarrollado la capacidad de sumergirse en la lectura comprendiendo y disfrutando de ella. Es que ser un lector competente tiene un precio que no se paga con solo leer un cuento y buenas noches.
En la última prueba de comprensión lectora, tomada por el Ministerio de Educación, el 84% de niños del nivel primario salieron desaprobados en una prueba que solo exigía competencias mínimas y básicas. Tomemos consciencia del rol que jugamos en la formación lectora de nuestros hijos y no esperemos que las autoridades gubernamentales sean los encargados de darle solución a este problema porque para entonces nuestros hijos se habrán convertido en tatarabuelos.
¿Qué podemos hacer para subir la escalera completa?
1. Destinar un presupuesto mensual -por mínimo que sea- para la adquisición de libros infantiles y de acuerdo a la edad del niño.
2. Los cuentos clásicos como Cenicienta, El gato con botas, Caperucita roja, etc., (tan vistos en la TV) no deben ser los únicos que conformen la biblioteca. Generalmente, estos libros no despiertan interés porque ya los han visto; adquiera otros libros de cuentos que tengan ilustraciones, colores, letras grandes y que le llamen la atención.
3. Visitar -con frecuencia- bibliotecas y que los niños vean la cantidad de libros que existen y cómo los lectores lo adquieren y los leen.
4. Ir a las ferias nacionales e internacionales de libros y participar en las actividades que se presenten.
5. Dar el ejemplo de que leemos y disfrutamos, en el último de los casos al menos finjamos que nos gusta leer. Leer periódicos, revistas, cómics, etc., es una alternativa.
6. Tener paciencia porque no es fácil que el niño tome un libro y lo lea. Si al menos lo observa y lee un poquito será una muestra significativa de que nuestra labor empieza a dar frutos. No le exija ni le imponga una lectura, hágale un comentario sobre el texto y como decimos en nuestro lenguaje coloquial, “píquele el diente” y luego, comenten –amenamente- la lectura.
7. Es vital que el niño tenga su propio espacio de lectura. Se puede mandar a hacer un librero adaptado a su estatura. Si el niño mide 1.10 cm., su librero podría medir 1.40 cm. Es necesario que el niño pueda alcanzar todos los compartimientos en donde se encontrarán sus libros.
8. Los libros se colocan con la tapa frente al niño, no de lomo como los libros de los adultos. Verlos así les permitirá ver el título acompañado de los dibujos que son muy llamativos. Les despertará -en algún momento- la curiosidad y lo tomarán. Se puede colocar algunos juguetes o cosas que le interese mucho al menor.
9. Llevar a los niños -si hay la posibilidad- a los cursos-talleres de lectura en donde se les enseña técnicas y hábitos de lectura. El conocer a otros niños que leen y disfrutan de la lectura es una gran motivación y estímulo.
10. Pedir los consejos de un especialista en lectura tanto para la adquisición de nuevos textos, como para la elaboración de diferentes actividades.
11. Ir al colegio del niño y pedir información sobre las actividades exclusivamente lectoras que se está haciendo o se hará. Si el colegio de su niño no tiene -a la vista de todos- una biblioteca especializada infantil, siquiera con 50 títulos diferentes, tenga presente que allí su hijo no desarrollará el hábito lector.
12. La Iliada, La Odisea, La divina Comedia, Crimen y Castigo, Los Miserables, Romeo y Julieta, El Quijote de la Mancha, etc., son libros maravillosos y transcendentales, pero NO son adecuados para un niño. Es como si a su hijo pequeño, en vez de darle una bicicleta con sus dos llantitas de soporte le diera un camión de dieciséis ruedas.
No he pretendido dar una fórmula para desarrollar lectores competentes, seguramente habrá muchos y mejores recursos, sino entrar en la reflexión y en el análisis propio de nuestra práctica cotidiana que es el desarrollo de la competencia lectora de los niños.
Gracias por leer
Manuel Urbina
Director Académico de
El Mundo Mágico de la Lectura
LOS PADRES Y EL COLEGIO: TRIUNFO DE LA LECTURA
viernes, 21 de diciembre de 2007
¡¡EXHIBAN LOS LIBROS, NO LOS ARCHIVEN!!
Cuando era pequeño me deleitaba visitar una librería que estaba muy cerca de nuestra casa. En su vitrina aparecían unos libros coloridos que me inmovilizaban, pero que me hacían mover todas las estructuras mentales e iniciaba un viaje tan hermoso e inefable, ¡tan solo mirando las tapas!Luego paso algo esperado: me enamoré de un libro de cuentos en donde aparecía un enorme genio de piel celeste, cabellos largos y lleno de joyas, en cuyas manos aparecía un jovencito llamado Simbad. Recuerdo que junté todas mis propinas y compré aquel libro: fue una aventura extraordinaria "tener" ese libro. Cuando dicen que el libro es un amigo, yo digo que es cierto.
Si queremos que nuestros hijos desarrollen habilidades lectoras tenemos que estimularlos desde muy pequeños. Podemos leerles o inventarles un cuento, cantarles una canción rimada como: "Un dedito chiquitito se llamaba Manuelito y el dedazo muy grandazo se llamaba el quesazo". Las canciones para nuestros hijos son una gran muestra de amor y ellos lo sienten totalmente.Por otro lado, es importante crearles un ambiente pequeño y acogedor para colocar sus primeros libros de tapa gruesa y plastificada; posteriormente, sus libros de cuentos. Coloquemos los libros de tal manera que el niño pueda encontrarse visualmente con toda la tapa. Ellos serán seducidos por las figuras, los colores, los títulos y, finalmente, los van a aceptar y empezarán su maravillosa aventura por el país de la imaginación y la fantasía.Démosle esa hermosa oportunidad.
Gracias por leer
Manuel Urbina
lunes, 17 de diciembre de 2007
PADRES LECTORES, HIJOS LECTORES

Cuando nuestros hijos no leen más allá de lo que se les exige en la escuela es porque nosotros no estamos dando muestras de que leer es importante y agradable. Existen otros factores que pueden dificultar el desarrollo de las habilidades lectoras, pero -en mi experiencia- nunca he visto que en un hogar en donde los padres fomenten la lectura, los hijos no desarrollen ese gusto y la actitud favorable por leer.
Cuando leamos, no le pidamos a nuestros hijos que se retiren y nos dejen tranquilos, porque entonces el libro sería visto como un objeto distanciador al que se le da más importancia que a ellos. Podemos aprovechar ese momento para hacer un comentario sencillo e interesante de lo que estemos leyendo y buscarles un cuento o una historia para que lo lean. ¡¡¡Se sentirán tan imporantes!!!
También podemos visitar librerías, bibliotecas, ferias de libros, imprentas, la sección libros en los supermercados, y comprar algunos libros tanto para el menor como para nosotros.
Bueno, les dejo con este video que es muy aleccionador.
Gracias por leer
Manuel Urbina
Director académico
de El Mundo Mágico de la Lectura
viernes, 14 de diciembre de 2007
LA FLUIDEZ LECTORA
La FL solo se aplica a la lectura en voz alta, en cambio cuando la lectura es silenciosa o mental ya no se denomina FL, sino Velocidad Lectora (VL).
Según el informe que se ve en el video, los niños peruanos presentan una F L muy baja, lo normal es 60 p.p.m hacia arriba; por el contrario, la mayoría de los niños no llega ni a la mitad.
¿Qué significa tener una F L baja?
Tener un F L baja es un indicador de que el niño aún no ha desarrollado sus habilidades lectoras mínimas, lo cual le lleva a tener una comprensión muy pobre. El leer lento trae como consecuencia la fácil desconcentración y atención por lo que la comprensión no se produce. Por el contrario, a mayor velocidad habrá mayor comprensión.
¿Por qué el niño tiene un F L mínima?
Cuando el niño presenta una F L pobre el responsable directo es el profesor o profesora de aula. El niño queda totalmente eximido de responsabilidad, porque es víctima de una mala experiencia educativa.
La F L se debe desarrollar durante los primeros grados de primaria, pero cuando se tiene a un docente incapaz, que no tiene nociones mínimas de lo que significa enseñar a leer se dan estos resultados. Estos docentes tienen unas características bien marcadas:
- Le dan más importancia a la ortografía (tildes, mayúsculas, letras).
- Se preocupan porque el cuaderno este limpiecito y que se llene rápido.
- Son amantes del dictado ( palabras de ortografía complicada que el niño no usa en su realidad).
- Les apasiona dejar mucha tarea (los padres son los que tienen que hacerlo a la medianoche).
- Leen en voz alta pésimo de tal manera que son los peores modelos que tiene el niño.
- Nunca llegan al colegio con un libro en la mano.
- Sus alumnos nunca los ven leer obras literarias ni científicas.
- Saben mucho de farándula y ven más de una novela.
- Culpan al niño y a su familia del fracaso lector.
La pobreza lectora del niño es el fiel reflejo de su docente, el hogar y la familia también son responsables, pero indirectos. Así que si quiere tener una idea de la calidad pedagógica y académica del profesor o de la profesora de su menor hijo, vea qué tan buen lector es.
¿Cuáles son las alternativas para mejorar la F L?
En primer lugar el profesor debe ser un modelo de buen lector, es decir, debe conocer el tono que le corresponde a cada uno de los signos de puntuación. Una coma, por ejemplo, no es fundamentalmente una pausa breve, es un tono ligeramente ascendente (tonema de semianticadencia) al que le sigue una pausa si es que es necesaria, de lo contrario la pausa no se va a sentir. Entonces, los signos de puntuación no son en esencia pausas, sino tonos (suben, se mantiene, bajan…).
En segundo lugar, tienen que sacarse de la cabeza que la ortografía de la palabra no es el tema más importante de la clase. Vean, por el amor a Dios, que ese viejo procedimiento no ha dado resultados en la mejora de la competencia lectora de los niños. Ese tiempo empleado es un tiempo inútil y perdido. Enseñarles más normas ortográficas cuando son pequeños produce mayor confusión a lo poco que han podido aprender. Es más fácil aprender a escribir correctamente a través de la lectura.
En tercer lugar, se aplican ejercicios de respiración y articulación. Los trabalenguas son ejercicios excelentes para que el alumno ejercite, por exageración, su aparato fonador.
Leer trabacuentos que ellos mismos pueden hacerlos, y deben leerlos exagerando la pronunciación, no importa que se equivoquen, se puede convertir en un juego muy divertido:
“Un niño travieso, un día estuvo triste porque hizo una travesura. Había sido muy gordo y estaba muy triste. Para divertirse un poco cogió su trineo y se tiró por una colina y tropezó con una piedra y su trineo se rompió en mil pedazos. Su padre se lo había hecho con un tronco que trajo de la trituradora de madera. Se lo vendió un trabajador tremendamente grande. Se lo trajo el día trece.En el tremendo trompicón se tropezó su hermana con otra piedra. Era una traviesa niña con trenzas de color de trigo”.
Otro ejercicio, también sencillo es la lectura de textos dialogados, y también ellos pueden crearlos:
- Pepe, sabes… estoy recontra enamorado de… ¡Yesabela!
- Quién es Yesabela… No la conozco… A menos que…
- Yesabela es la hermana de mi mejor amigo. Es bonita, es dulce…, es tan graciosita que me muero de amor por ella.
- Ah… Ya la recuerdo… Es una chatita…, rubia con su plata…, de anteojos gruesos y brakets tipo ferrocarril…
Como ven, nosotros los profesores jugamos un papel muy importante en el desarrollo de la F L y somos el principal modelo que tiene el niño. Pidamos el apoyo de los padres para que lean con sus hijos, y seamos ante ellos portadores de estrategias, consejos y buenas noticias; no los clásicos acusetes que buscan que los niños sean castigados. Enseñarles adecuadamente es nuestra misión y nuestro mayor orgullo… ¡Vamos a cambiar!
Gracias por leer
Manuel Urbina
Director académico
de El Mundo Mágico de la Lectura
jueves, 13 de diciembre de 2007
LECTURA Y RENDIMIENTO ESCOLAR
Mabel Condemarín, Felipe allende, “La lectura: teoría, evaluación y desarrollo”, pág. 7, Editorial Andrés Bello, 1993, Chile.
PONGAMOS NUESTRO GRANO DE ARENA POR LA LECTURA
Gracias por leer
Manuel Urbina
prolector@hotmail.com
PREJUICIOS EN LA LECTURA VELOZ
Iniciamos nuestra formación académica recibiendo la peor educación primaria del mundo, entonces los resultados que nos han mostrado las otras investigaciones tienen que ser verdaderas. A partir de esta situación, podemos entender por qué es que los alumnos de hoy tienen deficiencias lectoras.En el 99% de colegios nacionales y particulares no se enseña a leer para comprender. Lo que se enseña es a leer para que te escuchen y todavía mal porque ni en eso se tiene un programa sistematizado.Todavía se cree que la lectura silenciosa y la lectura oral sirve para lo mismo, nada tan falso; Philip S. Dale en su libro Desarrollo del lenguaje (1989) dice: “La lectura en silencio y la oral constituyen dos actividades que probablemente se diferencian más de lo que se cree. El lector experimentado omite muchos procesos fonológicos cuando lee en silencio. Una de las metas de la “lectura rápida” consiste en enseñar a eliminar la “vocalización mental”. Creer que se debe estudiar en voz alta está tan arraigado en la mentalidad de los profesores, tanto es así que recomiendan a los padres que estudien -en casa- en voz alta y los padres dicen frases como: “Pepe, no te escucho, no estás estudiando”, “Habla más alto que no oigo desde la cocina”.
Ante esta realidad, la LECTURA VELOZ surge como una alternativa para una buena lectura comprensiva, sin embargo, miles de profesionales de la educación movidos por su tremenda ignorancia y sus paradigmas conceptuales dicen que la Lectura veloz es una farsa, una tontería, un engaño, que no sirve (hablan como si hubiesen hecho el curso ya de manera autodidacta o en una institución). Lo cierto es que tienen tantos prejuicios, justo ahora cuando a través de la globalización sabemos que la Lectura Veloz se desarrolla en los países más desarrollados; tan solo necesitamos ingresar a la Internet para darnos cuenta de su tremenda importancia.
Aquí unas referencias sobre el tema:
“Al leer con excesiva lentitud un libro, no solo se pierde el tiempo, sino también la concentración, ya que la mente, obligada a trabajar por debajo de su capacidad, ocupa la energía sobrante en pensamientos ajenos y, sin rumbo fijo, comienza a vagar. Pero no obstante que la rapidez influye enormemente para una buena comprensión de lectura, es indispensable aplicarla con suma flexibilidad”. MAURICE NELLIGAN “El arte de leer y estudiar” Editoria Diana.
“La lectura rápida no es una lectura descuidada ni atropellada. Se confunde la rapidez con el apresuramiento. En realidad, el lector veloz es un lector activo, alerta y eficiente. Busca siempre las ideas importantes y los elementos de estructura y organización que le ayudarán a comprender mejor el significado de lo que esta leyendo. Por constante, el lector lento suele vagar en sus pensamientos, esto se debe al hecho de leer por debajo de su capacidad para estar alerta e interesado por la lectura. Generalmente se piensa que cuando se lee con rapidez no se dispone de tiempo para buscar el significado de las palabras desconocidas ni para leer pasajes difíciles, pero no es así. El lector veloz puede detenerse tan frecuentemente como el lector lento. El lector veloz terminará la lectura primero y recordará más que el lector lento y además podrá releer el texto con mayor facilidad. Aprender a leer con rapidez no es solo una necesidad impuesta por la premura de los tiempos en que vivimos, sino paso obligado para ser un buen lector, un lector eficiente” Dr. Armando Arturo Casillas castañeda (México)
Tenemos una alternativa para revertir la pobreza lectora y para ello necesitamos abrir nuestra mente hacia nuevas técnicas y procesos de lectura que se basen en la promoción de la investigación sobre el tema de la Comprensión Lectora y que no se quede solo en el campo de la teoría y el discurso. A propósito de esto último, aquí en Perú tenemos cientos de magísteres y doctores que solo se han quedado en la erudición porque son campeones para “hablar”, “citar”, “recomendar” “dejar tareotas” y “repetir casi literalmente a otros autores, incluyendo sus errores”, pero están tan alejados de la realidad que ni siquiera han pisado una aula de primaria o secundaria y mucho menos han logrado, por lo menos, enseñar a leer a un solo alumno, salvo a sus hijos, entonces surge la pregunta ¿de dónde saben tanto?
Gracias por leerManuel Urbina
¿QUÉ PASA CUANDO SE LEE LENTAMENTE?
MAURICE NELLIGAN “El arte de leer y estudiar” Editoria Diana.
REFLEXIONES SOBRE LA LECTURA

La calidad de la educación está relacionada con la lectura, pues es importante el dominio del lenguaje oral y escrito y para el dominio del mismo es importante la capacidad de lectura y escritura. Es verdad que todas las personas pueden leer y escribir en una etapa básica o mínima, pero de allí a poder leer con placer y entendimiento textos académicos o de investigación hay mucha diferencia. Millones de personas acuden a tomar clases, cada día, pero la gran mayoría no ha desarrollado su capacidad lectora lo cual solo les permitirá terminar una carrera para poder tener un trabajo y sobrevivir y no podrán tener todos los beneficios intelectuales-económicos que te da el ser un buen lector.
¿Qué son alfabetos funcionales?Se llama alfabetización al proceso que consiste en enseñar a leer y a escribir a las personas. Cuando esta ya sabe leer y escribir es considerada “alfabeta”, en el caso que no haya aprendido a leer y a escribir será llamada “analfabeta”. Hoy en día en la mayoría de los países latinoamericanos se está venciendo al analfabetismo, sin embargo, están aumentando exponencialmente la cantidad de “alfabetos funcionales”, esto es, personas que sabiendo leer no leen, sabiendo escribir no escriben. Este grupo ha estudiado los niveles primarios y secundarios, incluso el nivel universitario, pero al no leer y escribir actúan como verdaderos “analfabetos”. Sin embargo, tal como ya se les está clasificando, se convierten en “alfabetos funcionales” porque en el sistema educativo no busca el desarrollo de lectores autónomos o lectores que leen por el placer y gusto de leer; por el contrario el sistema educativo ha visto en la lectura solo un instrumento para el estudio y punto.
¿Con qué tipo de libros se forman los buenos lectores?
Para formar buenos lectores se debe leer libros que le produzcan satisfacción y gusto durante el acto de la lectura. Los libros adecuados no son los libros de textos o los libros con preguntas, tareas y cuestionamientos. El buen lector podrá llegar –durante todo el proceso que dure la lectura placentera- a leer libros de texto y a sacarle mucho provecho, pero para eso se requiere que su iniciación en la lectura sea un acto de felicidad. Por el contrario se tiene la idea equivocada que el alumno no debe usar la lectura como un acto de placer porque, sencillamente, -dicen- es inmoral y no debe tener cabida en un centro de estudio. Con esta idea tenemos, pues, un número creciente de “alfabetos funcionales” o “neoanalfabetos”.
REFLEXIONES FINALESLa educación es un fracaso en la medida de que la competencia lectora y escrita no se desarrollen. Para ello se debe desterrar una serie de mitos como aquel que sostiene que se debe leer para aprender cosas útiles y, por el contrario, no se debe leer para conseguir placer, alegría o felicidad.
Tener competencia lectora significa haberle encontrado sentido al acto lector y ello hace que el alumno se pueda acercar a los libros de textos y encontrarle un valor intrínseco para su formación y desarrollo. La lectura no se aprende a través de la imposición o amenazas disimuladas –como se ve hasta en las maestrías-, sino a través de que el alumno le encuentre gusto y sentido a lo que lee. El profesor debe conversar mucho con los alumnos e iniciarlos –si se considera maestro- de a poco, de menos a más y sistemáticamente, en el mundo fascinante de la lectura, porque es muy fácil mandar a leer y a sacar preguntas y conclusiones cuando él mismo ni siquiera ha podido demostrar en la práctica su competencia lectora. En otras palabras, el profesor debe ser el principal modelo de lectura para sus alumnos, después de él vendrán los alumnos con unas ganas superlativas de seguir sus pasos, de lo contrario, solo estaremos fomentando lectores mecánicos, resentidos y amargados.
Gracias por leer
MANUEL URBINA
Director de El Mundo Mágico de la Lectura
UNOS CONSEJITOS PARA LEER MEJOR
La LECTURA VELOZ es una técnica que te permite leer mucho más rápido y con una mejor concentración lo cual hace que tu comprensión sea mejor. "Leer sin comprender no es leer, solo es decodificar".
La LV te permite que mejores tu lectura en calidad y tiempo. Todos sabemos que el 90% del conocimiento está en los libros y reconocemos su importancia, pero ¿por qué se nos hace tan difícil leer?, ¿por qué compramos un libro y nunca lo terminamos de leer?, ¿por qué preferimos ver una película, escuchar música o engancharnos en la internet?...
La respuesta es porque LOS COLEGIOS NO ENSEÑAN A LEER, ENSEÑAN A DECODIFICAR O SIMPLEMENTE A REPETIR ORALMENTE EL TEXTO... Es por eso que tenemos tantos problemas de lectura. Por otro lado en Holanda, Finlandia, Francia, Canadá, Inglaterra, etc., la gente DISFRUTA DE LA LECTURA, SE DESESPERAN POR LEER, un reporte comentaba que los "niños "leen hasta 60 libros al año y en América Latina con las justas estamos en 2 por persona. He investigado y en estos países se trabaja la lectura global, es decir, no leen mirando sílaba por sílaba sino miran toda la palabra como si fuera un todo y de allí se parte a mirar grupos de palabras como si fuera un todo; la ventaja es que nuestro cerebro lo que capta son ideas o conceptos que se van relacionando. Cuando leemos palabra por palabra nuestro cerebro lo que capta son estructuras escritas con un montón de significados (polisemia) y mientras busca su interpretación semántica, va olvidando los conceptos anteriores.Algunas recomendaciones:1. Usa un lapicero o palito chino cuando leas como si fuera tu dedo. (Muchos creen que usar el dedo durante la lectura es un vicio, por qué entonces estas personas usan su dedo de la misma forma cuando buscan un número en la guía telefónica, cuando suman, etc.) Así tus ojos ya no están ocupados en ubicar o rastrear la línea de lectura y mejora el campo de percepción.
2. En vez de deslizar el lapicero, da pequeños saltitos de dos (para empezar) en dos palabras y verás que puedes captar perfectamente el significado de lo que lees. Trata de aumentar en la medida de que te sea más conveniente.
3. No muevas los labios, porque ello hace que tu lectura silenciosa se maneje al ritmo de tu lectura oral. (La lectura oral es SOCIAL , se lee para que te escuchen los otros; tu preocupación no es comprender lo que lees, sino quedar bien con los oyentes). La lectura silenciosa es personal, es una lectura EXCLUSIVAMENTE de estudio y hasta cien veces más rápida y comprensiva que la otra.
4. No hagas regresiones. Las regresiones se hacen cuando no entendemos lo que hemos leído, pero la mayoría retrocede por que cree que no ha entendido y cuando lo hace solo confirma que sí había comprendido. Aquí es cuando las regresiones se convierten en un vicio de retroceder por retroceder y como vicio se convierte en un hábito. Te recomiendo que no retrocedas, si no has entendido realmente, termina de leer ese párrafo y vuelve a iniciarlo.
5. Prefiere la calidad y no la cantidad. Es mejor leer diez minutos en un ambiente adecuado que dos o tres horas en la cama, en el sofá, con música, con TV, comiendo, etc. (salvo que sea una lectura de placer como una obra literaria, o de información periodística). si vas a leer un tema de estudio, busca un lugar con bastante luz. Siempre tu nariz debe apuntar al centro del texto y tu cabeza no debe estar tan agachada o colgada porque eso estresa a los pocos minutos.
6. Usa instrumentos de apoyo. Leer es un proceso interactivo y nos defendemos mejor si usamos resaltadores o marcadores fosforescentes, lápices bicolores, pos-it. Ten presente que si el libro es tuyo lo puedes subrayar, subraya lo que te parece más importante, no tengas temor, sí es como se ira aprendiendo a subrayar. Anota al costado del texto tus opiniones o palabras claves que sinteticen lo leído. No tengas temor... es tu libro... (derecho de propiedad).
Les volveré a escribir, gracias por la atención y recuerden que si no mejoramos nuestra calidad de lectura, terminaremos sepultados por un alud de libros.
Gracias por leer
Manuel Urbina
Director de El Mundo Mágico de la Lectura
LECTURA EN SILENCIO Y EN VOZ ALTA: ¡¡¡¡SON TAN DISTINTAS!!!
...ME DESCUBRÍ CAPAZ DE PENSAR MÁS RÁPIDO
TONY BUZAN “El libro de la lectura rápida”.Ediciones Urano
Tony Buzan , psicólogo británico, desarrolló una herramienta de aprendizaje a principio de los años 70, que consitía en un sistema diferente a los convencionales, de leer y escribir los pensamientos. Es el creador del método de los mapas mentales.
Esta técnica permite entrar a los dominios de nuestra mente de una manera más creativa. Su efecto es inmediato: ayuda a organizar proyectos en pocos minutos, estimula la creatividad, supera los obstáculos de la expresión escrita y ofrece un método eficaz para la producción e intercambio de ideas.
Tony Buzan es integrante de la Fundación de la Mente, presidente del Club Mundial de la Mente y autor de 82 libros, Buzan asesora a gobiernos, multinacionales, a equipos olímpicos y atletas.
CONCEPTOS EQUIVOCADOS SOBRE LA LECTURA VELOZ

Generalmente se piensa que cuando se lee con rapidez no se dispone de tiempo para buscar el significado de las palabras desconocidas ni para leer pasajes difíciles, pero no es así.
El lector veloz puede detenerse tan frecuentemente como el lector lento. El lector veloz terminará la lectura primero y recordará más que el lector lento y además podrá releer el texto con mayor facilidad.
Aprender a leer con rapidez no es solo una necesidad impuesta por la premura de los tiempos en que vivimos, sino paso obligado para ser un buen lector, un lector eficiente.
Dr. Armando Arturo Casillas castañeda (México)
FUNDAMENTOS DE LA LECTURA VELOZ
MAURICE NELLIGAN “El arte de leer y estudiar” Editorial Diana
ES PARA LLORAR
César Hildebrandt
LA ORTOGRAFÍA EN EL KOLEGIO
Hoy se sabe que nuestros niños leen muy poco y escriben peor. Cuando se habla sobre este tema aparecen muchos culpables: el hogar del alumno, su colegio, el Estado, la comunidad, el gobierno de turno, los gobiernos anteriores, y un poco más incluyen a la selección de fútbol.
Lo evidente es que el niño aprende el proceso de la lectura y escritura en el colegio, entonces ¿seremos los profesores los principales responsables de esta tragedia nacional?, pues veamos:
-Acaso los profesores no convertimos la hoja del cuaderno donde el niño nos presenta su composición –emocionados al comienzo-, en una hoja llena de cruces rojas que indican que está mal... y aún peor, algunos desalmados profesores, escriben la tilde que faltó colocar con una raya de diez centímetros o más que incluso traspasa la hoja.
-Acaso los profesores de los primeros grados no creemos que la ortografía es la esencia del curso de comunicación, como si el requisito para comunicarnos a través de la palabra escrita fuese el tener una perfecta ortografía cuando se tiene 6, 7, 8, 9..., añitos.. Esto es como si un niño de dos años que está aprendiendo a hablar dijese "pátano", "maiposa", en vez de "plátano" y "mariposa", y que su mamá o papá lo reprenda y le ponga mala cara por "haber hablado incorrectamente”. ¿Qué crees que pasaría en el bebe? Pues, la respuesta es que nunca más va a querer hablar, salvo un sí o un no.
-Acaso esta frustración no es lo que les ocurre a los niños cuando se le corrige con reglas que ni el mismo profesor las conoce a profundidad, y que no es lo esencial en la escritura porque la verdadera esencia es la capacidad comunicativa, lo otro es el cascarón que poco a poco se va internalizando como consecuencia de la práctica que resulta ser el mejor método de aprendizaje. ¿Tendrá deseos de escribir el niño en el futuro?
-Acaso los profesores no usamos las amenazas y chantajes para que el alumno aprenda la reglas ortográficas. El alumno, claro que las aprende, pero maldiciendo y odiando a todo aquello que implique palabras impresas. ¿Tendrá ganas de leer en el futuro? Al respecto, Gabriel García Márquez , en el Primer Congreso Internacional de la Lengua, en 1997, dijo: "Jubilemos la ortografía, terror del ser humano desde la cuna: enterremos las haches rupestres, firmemos un tratado de límites entre la ge y jota, y pongamos más uso de razón en los acentos escritos, que al fin y al cabo nadie ha de leer lagrima donde diga lágrima ni confundirá revolver con revólver. Y que de nuestra be de burro y nuestra ve de vaca, que los abuelos españoles nos trajeron como si fueran dos y siempre sobra una". ¿Por qué lo habrá dicho, no?
-Acaso no sabemos los profesores que esas benditas reglas cuando son excesivas en vez de ayudar al estudiante, lo confunden y complican el nivel ortográfico que tanto les a costado conseguir. ¿No sería mejor que el alumno aprenda las reglas ortográficas a través de la práctica misma? ¿Escribir sus vivencias, sus sueños, sus deseos, la forma cómo nos ven, etc., no sería más productivo? ¿Aprender a escribir no sería mejor si escribe libremente y sin tensiones como si se debe colocar una "s", "c","z", "x"?
- Acaso los profesores no nos hemos olvidado de leer delante de nuestros alumnos y comentar con ellos sobre el autor, el tema, si es interesante, y usarlo como una fuente de motivación permanente. ¿Cuántos libros nuevos o usados compramos al mes? ¿Hemos terminado de leer siquiera uno de esos libros? Somos campeones en pedirles que lean obras literarias cuando nosotros con las justas leemos esos diarios vergonzosos como El Trome o Ajá, y ni siguiera leemos las noticias trascendentes, sino las de espectáculos y deportes. ¿Qué buen ejemplo damos, no?
Por todo ello creo que es hora de cambiar nuestros viejos paradigmas y prepararnos para enfrentar este reto de revertir la pobreza lectora y escritura en nuestro país. Cómo se dice “manos a la obra” y empezar este proceso por nosotros mismos a través de la investigación que es tan abundante, hoy en día, en la Internet y en algunas bibliotecas especializadas, y ponerlas en prácticas inmediatamente porque si no somos parte de la solución, somos parte del…
Gracias por leer.Manuel Urbina
Director de El Mundo Mágico de la Lectura
MI HIJA NO QUIERE HACER LA TAREA
Hace unos días vi a mi hija, que está en segundo grado de primaria, muy mortificada por una tarea de Razonamiento Verbal. Me acerqué para preguntarle qué le sucedía; me miró con su rostro angustiado y me dijo que no le agradaba hacer esa tarea porque era –según sus propias palabras- “una tontería”. No me llamó la atención esta respuesta porque en la mayoría de los colegios, los profesores dejan unas “tareas” que son absurdas, aburridas, detestables e incoherentes. Es bueno que los niños lleven tareas a casa porque ayudan a reforzar los conocimientos adquiridos en clase y, además, de a poco van formando valores como la responsabilidad, la dedicación y el estudio.
En Finlandia, país campeón mundial en comprensión lectora desde hace más veinte años y líder de la PRUEBA PISA 2000, 2003, 2006, las tareas para los estudiantes de primaria no deben pasar de los treinta minutos y deben tener objetivos bien claros y concretos. Por el contrario, aquí en Lima las tareas pueden durar dos, tres, cuatro horas y no solo van dirigidas al niño, sino a toda la familia la cual es, finalmente, quien realiza la bendita tarea. Es cierto que no estamos en Finlandia, pero la educación es una sola y se rige sobre la base de principios pedagógicos que sí son universales.
Volviendo a la tarea que resultaba todo un fastidio para mi hija, observé que esta consistía en buscar el significado de cada una de las diecinueva palabras dejadas como entradas y copiarlas literalmente en el cuaderno de Razonamiento Verbal. La cuarta de ellas era PINO y decía:
Pino m. Nombre de varios árboles gimnospermos de las pináceas, de hojas aciculares persistentes en hacecillos de dos a cinco flores unisexuales estróbilas. Producen un falso fruto, la piña que contiene las semillas o piñones. 2 Madera de estos árboles.
Esta palabrita hubiera sido muy fácil de entender si tan solo se hubiera mencionado al arbolito que todos hacemos en la Navidad; sin embargo, al anotar todo el concepto con sus dos acepciones, la alumna –mi hija- terminaría más confundida que al comienzo y reforzaría su desprecio hacia los diccionarios, las tareas y al mundo que involucre palabras y textos.
Dejar tareas de este tipo no ayudan, por el contrario, provocan que el curso o los cursos pierdan su atractivo natural y se incremente la apatía y desgano cuando se tenga que hacer otras tares.
Finalmente, mi hija escribió este concepto: “es el nombre de un arbolito muy bonito como aquel que se arma en la Navidad y su madera es fina y resistente”. Al día siguiente fui a su colegio y tuve una conversación, sobre el tema, con la profesora quien inmediatamente reconoció el error y prometió tener un mejor criterio para dejar nuevas tareas. Muchas veces se cree que si los padres cuestionan el trabajo de los profesores, estos van a tomar represalias con el menor, pero no es así. Al contrario, los profesores están advertidos de que en el hogar de ese alumno, hay una familia que está al tanto de lo que pasa en el colegio porque ante la lógica y razón, no hay excusa que sirva.
Gracias por leer
Manuel Urbina
Director de El Mundo Mágico de la Lectura
¿ES SUFICIENTE CONTARLES UN CUENTO?
1. Destinar un presupuesto mensual -por mínimo que sea- para la adquisición de libros infantiles y de acuerdo a la edad del niño.
2. Los cuentos clásicos como Cenicienta, El gato con botas, Caperucita roja, etc., (tan vistos en la TV) no deben ser los únicos que conformen la biblioteca. Generalmente, estos libros no despiertan interés porque ya los han visto; adquiera otros libros de cuentos que tengan ilustraciones, colores, letras grandes y que le llamen la atención.2. Visitar -con frecuencia- bibliotecas y que los niños vean la cantidad de libros que existen y cómo los lectores lo adquieren y los leen. 3. Ir a las ferias nacionales e internacionales de libros y participar en las actividades que se presenten.4. Dar el ejemplo de que leemos y disfrutamos, en el último de los casos al menos finjamos que nos gusta leer. Leer periódicos, revistas, cómics, etc., es una alternativa.5. Tener paciencia porque no es fácil que el niño tome un libro y lo lea. Si al menos lo observa y lee un poquito será una muestra significativa de que nuestra labor empieza a dar frutos. No le exija ni le imponga una lectura, hágale un comentario sobre el texto y como decimos en nuestro lenguaje coloquial, “píquele el diente” y luego, comenten –amenamente- la lectura.6. Es vital que el niño tenga su propio espacio de lectura. Se puede mandar a hacer un librero adaptado a su estatura. Si el niño mide 1.10 cm., su librero podría medir 1.40 cm. Es necesario que el niño pueda alcanzar todos los compartimientos en donde se encontrarán sus libros. 7. Los libros se colocan con la tapa frente al niño, no de lomo como los libros de los adultos. Verlos así les permitirá ver el título acompañado de los dibujos que son muy llamativos. Les despertará -en algún momento- la curiosidad y lo tomarán. Se puede colocar algunos juguetes o cosas que le interese mucho al menor.8. Llevar a los niños -si hay la posibilidad- a los cursos-talleres de lectura en donde se les enseña técnicas y hábitos de lectura. El conocer a otros niños que leen y disfrutan de la lectura es una gran motivación y estímulo.9. Pedir los consejos de un especialista en lectura tanto para la adquisición de nuevos textos, como para la elaboración y planificación de diferentes actividades.10. Ir al colegio del niño y pedir información sobre las actividades exclusivamente lectoras que se está haciendo o se hará. Si el colegio de su niño no tiene -a la vista de todos- una biblioteca especializada infantil, siquiera con 50 títulos diferentes, tenga presente que allí su hijo no desarrollará el hábito lector.11. La Iliada, La Odisea, La divina Comedia, Crimen y Castigo, Los Miserables, Romeo y Julieta, El Quijote de la Mancha, etc., son libros maravillosos y transcendentales, pero NO son adecuados para un niño. Es como si a su hijo pequeño, en vez de darle una bicicleta con sus dos llantitas de soporte le diera un camión de dieciséis ruedas.
No he pretendido dar una fórmula para desarrollar lectores competentes, seguramente habrá muchos y mejores recursos, sino entrar en la reflexión y en el análisis propio de nuestra práctica cotidiana que es el desarrollo de la competencia lectora de los niños.
Gracias por leer
Manuel Urbina
LA BIBLIOTECA DE NUESTROS HIJOS
La biblioteca para el niño debe ser especialmente construida y adaptada a su tamaño, para que pueda manipular libremente los materiales de lectura. Los libros de cuentos deben estar dirigidos a su competencia lectora. Si tiene 8 años, no le podemos dar libros para niños de 10, 12, 16, 20 años porque los va a rechazar inmediatamente. Y pensar que todavía creemos que el Tesoro de la Juventud es la colección ideal.
Hoy existen muchas editoriales que en la contratapa colocan la edad a la que está dirigido el libro. Es verdad que estos tienen un precio algo elevado, pero ese es el precio que debemos pagar si queremos que nuestros hijos sean lectores competentes, aunque existen otras posibilidades como los libros de segundo uso y los de procedencia dudosa que se venden en muchas ferias.
Otro aspecto es la forma cómo debe colocarse el libro, nunca con el lomo en exhibición, sino toda la tapa multicolor frente al lector ya que de esta manera en algún momento le va a llamar su atención y lo va coger, lo cual ya es una buena señal. Se puede alternar los libros con algunos juguetes, recuerdos o álbumes de fotografías del niño, porque uno de los objetivos es que se familiarice con el lugar y entienda que los libros forman parte de ese mundo de cosas agradables y significativas. Si colocamos al pie de la biblioteca, una alfombra, unos cojines o una mesa pequeña con su silla, la actividad puede verse más enriquecida.
Los padres debemos estar muy atentos para felicitarlos y hacer un tremendo escándalo -reforzarmiento de conducta- cuando el niño se acerque a este mágico lugar y lea algo. Podemos acompañarlos en ese ambiente cuando lean, les podemos leer algún cuento e incluso podemos jugar ahí y sacar a ese niño interior que todos llevamos y que también quiere leer.
Gracias por leer
Manuel Urbina
Director de El Mundo Mágico de la Lectura